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El grupo de Ciencias Aplicadas de Microsoft está investigando la creación de pantallas que siguen el movimiento ocular mediante un sistema de reconocimiento de formas y permite la emisión de imágenes diferentes para cada usuario. Esta tecnología, aplicada al campo de la televisión en 3D, funciona con un máximo de dos personas, pero Microsoft intentará aumentar la rapidez de emisión para aumentar este número -que llega a cuatro usuarios cuando se emite en 2D-. La base de estas nuevas pantallas está en una lente de no estática, que emite imágenes diferentes para el ojo izquierdo y el derecho, lo que crea el llamado efecto 3D, algo que, hasta ahora, se conseguía mediante gafas que transformaban la imagen doble mostrada en las pantallas normales.

A pesar de que se trata de tecnología cuya existencia existía de manera teórica, su aplicación práctica está aún en desarrollo, ya que sólo ahora se ha podido desarrollar la tecnología de seguimiento ocular efectivo y de emisión de luz mediante las nuevas pantallas LCD, que son las que posibilitan que se reflejen las;; imágenes en la lente con una velocidad suficiente para crear la impresión en el ojo humano de que se está percibiendo una imagen de manera continuada.

Si Microsoft consiguiera desarrollar esta tecnología a un nivel aceptable para el mercado -más usuarios simultáneos y producción en masa para abaratar costes- supondría un firme apoyo a la consumición de imágenes 3D en el domicilio y no sólo en recintos especiales como las salas de cine. Además, con estas pantallas se evitaría la dependencia de las gafas que ahora son necesarias -que aumentan el coste y limitan el número de usuarios-.

Más allá de las aplicaciones de un televisor en 3D, esta nueva forma de emitir imágenes permitiría que varias personas vieran contenidos diferentes en una misma pantalla, cambiando la forma de utilizar la televisión; o podría usarse para autorizar a un sólo individuo a ver determinadas imágenes, ocultas para el resto.